Los bosques en Honduras son diversos: de coníferas, con una variedad de siete especies de pino; latifoliados, con 200 especies de árboles y una rica biodiversidad sobre todo en tierras bajas; nublados latifoliados: pinares o bosques mixtos en tierras altas; latifoliados en lugares de clima seco; y manglares.
En Honduras el manejo forestal está enfrentando serios desafíos institucionales, económicos y políticos que ponen en peligro un manejo forestal sostenible. Diversos factores como la tala ilegal, los incendios forestales, las plagas, y el avance de la frontera agrícola están haciendo que en la actualidad la cubierta forestal de Honduras disminuya aproximadamente al 60% de su potencial. A esto se suma que los aprovechamientos del bosque se ven como el único mecanismo para generar ingresos que permiten al sector público forestal cumplir con sus obligaciones financieras. El consumo de leña, como fuente esencial de energía para el país – y la única para buena parte de la población rural – proviene en su mayoría de los bosques latifoliados (de hoja ancha y madera dura) causando así altos índices de deforestación.
En este contexto, la Fundación Vida busca nuevas formas de realizar la gestión forestal, promoviendo una mayor participación para los municipios y comunidades, con el fin de tener una mayor gobernanza. Estas acciones se ven complementadas con la generación de mecanismos legales y financieros a nivel local que permitan a las comunidades conservar su recurso forestal.
Entre los proyectos que se destacan en esta área de trabajo están:
- Incidencia para contribuir a la gobernabilidad del bosque desde los consejos consultivos forestales
- Fortalecimiento de ocho municipios en la protección del bosque contra incendios forestales